Agradecimientos
Por Leila Martínez Gil
Vaya que he estado desconectada de mi blog por algo de tiempo, he perdido práctica en mi escritura, desde noviembre que no lo hacía, ese mes fue la cúspide de mi buen sentir pero que lamentablemente esta vez como ya lo dije en alguna entrada anterior este sentir tuvo fecha de vencimiento.
En esta ocasión si estoy en el sentir exquisito del amor nuevo, y de la misma manera espero dure mucho tiempo más. Con estas palabras abro el tema del que quisiera escrbir en este momento y que pues, viene en el título.
Recuerdo que al salir de la primaria, todo el mundo te escribía en los tales "recuerditos" que ya fueran estampados en la playera de la escuela o en una libreta la oración "no cambies", en mi caso pasaron 3 años para ser exacta para que me volvieran a escribir "recuerditos" pero de nuevo apareció el para mi, ya típico "no cambies", sin embargo para ese entonces yo ya había cambiado cosas físicamente e intelectualmente.
Al pasar del tiempo te das cuenta que el "no cambies" no aplica, ya que, sin mportar tu edad , por el hecho de cosechar nuevas experiencias has cambiado.
Actualmente estoy en una etapa de transición en la cual han estado ocurriendo cambios, bastantes cambios, este año, lo admito, no ha sido nada fácil ni para mi ni para mi familia, ha sido de muchos sinsabores, por supuesto, pero no podemos dejar pasar por eso las muchas o pocas alegrías que nos han llegado durante este tiempo.
Sé que no es propio de mi o de mis escritos, pero si le agradezco a GADU o a Dios o como sea que se llame ese ente superior, el sufrir y el gozar, el dejar y el adquirir, el llorar y el reir, entre otras muchas cosas que hacen a mi vida. No con esto quiero decir que mi vida sea más o menos importante que la de los demás, pero todas estas experiencias y sentimientos al fin y al cabo la hacen MÍA.
Agradezco de la misma manera los malos, los regulares y los buenos amores que me he encontrado, que he sido afortunada de tener. Agradezco el apoyo de mis verdaderos amigos ya mi familia en los iempos difíciles pues ellos han estado ahí durante todo el proceso, me han demostrado su cariño en todo momento.
En fin agradezco que se me hayan presentado nuevas oportunidades para mejorar y hacer cada día mejor las cosas que me corresponden con responsabilidad, lealtad y amor.
Vaya que he estado desconectada de mi blog por algo de tiempo, he perdido práctica en mi escritura, desde noviembre que no lo hacía, ese mes fue la cúspide de mi buen sentir pero que lamentablemente esta vez como ya lo dije en alguna entrada anterior este sentir tuvo fecha de vencimiento.
En esta ocasión si estoy en el sentir exquisito del amor nuevo, y de la misma manera espero dure mucho tiempo más. Con estas palabras abro el tema del que quisiera escrbir en este momento y que pues, viene en el título.
Recuerdo que al salir de la primaria, todo el mundo te escribía en los tales "recuerditos" que ya fueran estampados en la playera de la escuela o en una libreta la oración "no cambies", en mi caso pasaron 3 años para ser exacta para que me volvieran a escribir "recuerditos" pero de nuevo apareció el para mi, ya típico "no cambies", sin embargo para ese entonces yo ya había cambiado cosas físicamente e intelectualmente.
Al pasar del tiempo te das cuenta que el "no cambies" no aplica, ya que, sin mportar tu edad , por el hecho de cosechar nuevas experiencias has cambiado.
Actualmente estoy en una etapa de transición en la cual han estado ocurriendo cambios, bastantes cambios, este año, lo admito, no ha sido nada fácil ni para mi ni para mi familia, ha sido de muchos sinsabores, por supuesto, pero no podemos dejar pasar por eso las muchas o pocas alegrías que nos han llegado durante este tiempo.
Sé que no es propio de mi o de mis escritos, pero si le agradezco a GADU o a Dios o como sea que se llame ese ente superior, el sufrir y el gozar, el dejar y el adquirir, el llorar y el reir, entre otras muchas cosas que hacen a mi vida. No con esto quiero decir que mi vida sea más o menos importante que la de los demás, pero todas estas experiencias y sentimientos al fin y al cabo la hacen MÍA.
Agradezco de la misma manera los malos, los regulares y los buenos amores que me he encontrado, que he sido afortunada de tener. Agradezco el apoyo de mis verdaderos amigos ya mi familia en los iempos difíciles pues ellos han estado ahí durante todo el proceso, me han demostrado su cariño en todo momento.
En fin agradezco que se me hayan presentado nuevas oportunidades para mejorar y hacer cada día mejor las cosas que me corresponden con responsabilidad, lealtad y amor.
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